TemuerdoMundo

Despierto.

Muerdo un poco el mundo mientras mastico mi manzana.

No soy Blanca Nieves, pero claro,cuando quieras puedo ser la Bella Durmiente (pero nunca la Cenicienta como siempre me dices), aqui me he reido.

Me rio, como cuando se hace una travesura, con esa sonrisa delincuencial que etiqueta un "yo no fui".

Nicolás me mira como cuando tiene hambre, dentro de un rato, le digo, nos bajamos del mundo.

Y ahora pienso en ti...Tú el fantasma,siempre fuiste mejor con la verborrea que con los verbos.
Peligroso? de repente, pero no ahora, ahora que despierto feliz, que me muerdo el mundo mientras mastico mi manzana, que ha salido el sol encima de mi casa, que soy del viento como siempre, que guardo en cajas de galletas cada verbo mal usado y etiqueto todo con un "yo no fui", ahora que no te extraño ni me extrañas, ahora que eso que me vendiste a todo color, nunca murió porque nunca vivió.

Te reconozco y reconozco que hoy te veo como eres, un postre,todo un tiramisú mal hecho.
Creo que porfin encontraste la dosificación exacta de ingredientes( seguramente que si has de indentificarme en tu composición, siempre fui mucho café para tu Mascarpone)
Y si ahora te nombro (disculpándome con quien te ande cocinando los últimos días) es porque encontraste el punto exacto de café, porque el cacao,que no son mas que las mariposas en el estómago disfrazadas, han llegado a ti en la medida exacta. Aqui sonrio de nuevo, porque según las reglas mundanas debería yo de odiarte, de cruzar los dedos para que todo salga mal y cosas de esas que no son.
Que sea usted lo suficientemente feliz, aunque suene a absurdo. Que le besen y le roben de su Mascarpone, que yo no fui, no me quedé ni con un poquito, me imagino que por acuerdo mutuo y tácito. Adiós tiramisú.


Y asi vuelvo, soy inocente de mi y de ti. Porque canto descalza y me muerdo el mundo y me bajo si se me da la gana.

Tú, que siempre has sido la sal que endulza mis días, tú que te metiste en mi sueño sabatino para amanecer feliz a un Domingo soleado.
Tú que nunca inventaste despedidas.